Aseguran que «cuando se estimula a los presos con educación y trabajo, muchos no vuelven a delinquir»
“Cuando a los presos se los estimula con educación y trabajo, no todos pero muchos, no vuelven a reincidir, y eso es lo que esperamos todos los que estamos libres, que no vuelvan a delinquir”, dijo Halperin al ser consultado por radio Vorterix sobre si los presos tienen que recibir o no pago por su trabajo, en base a su experiencia en el programa UBA XXII.
El programa UBA XXII es un Programa de la Universidad de Buenos Aires, dependiente de la Secretaria de Asuntos Académicos, que dicta carreras de grado y cursos presenciales (actividades de extensión) en establecimientos del Servicio Penitenciario Federal.
El programa tiene por finalidad garantizar el acceso a la formación universitaria curricular y extra curricular de personas que se encuentran privadas de su libertad ambulatoria.
Según Halperin, la ley 24.600 de ejecución de penas privativas de la libertad establece en su artículo 120 que “el 10 por ciento del ingreso de los presos por su trabajo es para indemnizar los daños y perjuicios causados por el delito (según lo disponga la sentencia judicial); el 35 por ciento para la prestación de alimentos, según el Código Civil; el 25 por ciento para costear los gastos que causa en el establecimiento, y el 30 por ciento para formar un fondo propio que se le entregará a su salida del penal”.
“Quienes reclaman que los presos trabajen en negro están impidiendo que con su salario el preso pague a la víctima y al Estado, por ejemplo”, advirtió el ex funcionario y abogado.
Halperin señaló también que “las personas que están en prisión están pagando por lo que hicieron”, y que “la mitad de los 60.000 presos aún no tienen condena”.
“Para los que quieren que los presos la pasen mal en la cárcel, les digo que el Estado los pone a trabajar y no les paga, aunque la ley dice que es ilegal hacerlos trabajar sin pagarles, por eso este fallo que obliga al Estado a pagar a los presos por su trabajo”, consignó.
La Cámara Federal de Casación Penal hizo lugar a un hábeas corpus colectivo en un caso por el trabajo de los presos, en un fallo donde advirtió que la lucha contra la inseguridad sólo sería posible si se brinda empleo a los presos, y dispuso que se cree un régimen laboral para los convictos con idénticos derechos que los de una persona libre.
El fallo hace hincapié en el principio constitucional de “igual remuneración por igual tarea” para las personas privadas de su libertad.
“La ley se hace pensando en la sociedad, ni en las víctimas solamente, ni en los victimarios. La mirada del legislador tiene que ser compleja y tener en cuenta todas las aristas. Este fallo se hizo pensando en todas las aristas, lo que necesita la víctima, que es una sentencia; lo que necesita la sociedad, que es que salga mejor y no reincida”, sentenció el ex titular del programa UBA XXII.
Halperin dejó en claro que “la cárcel no mejora la situación anterior del preso, sino que la empeora, por eso la necesidad de que el Estado le de los instrumentos para que al salir de la cárcel pueda trabajar y no volver a delinquir».
