Inolvidable noche de música de la mano de la Sociedad Española de Arrecifes
El sábado en el Teatro Regina se realizó el Gran Show Musical a beneficio de la Sociedad Española de Arrecifes, organizado por la Comisión Recuperadora del Cine Teatro Español, por la iniciativa de Omar Pellegrini.
Fue una noche de talento bajo el lema “Todos somos Sociedad Española”, con la conducción de Mario Zaccaría y Mirta Marziali, más la presencia de músicos arrecifeños de primer nivel y gran asistencia del público local, aproximadamente 450 personas. Un éxito musical, organizativo y solidario.
El comienzo fue un show de baile español, con 15 bailarinas en escena. Seguidamente se presentó “Ayer Nomás”, quien de la mano de Omar Pellegrini y su voz llena de cuerpo y melodía, robaron al público la primera gran ovación de la noche.
Eduardo Redondo fue el encargado del tango, con 5 interpretaciones fuera de serie de algunos clásicos arrabaleros como “Tinta Roja” y “Uno”, y hasta algún que otro tema melódico. El dominio de la escena, su interacción con el público, su efervescencia y sobre todo la potencia de su voz fueron notables, un show tan prolijo y sentido que daban ganas de seguir disfrutando varias canciones más.
Un estilo diferente llegó de la mano de “Banda Expansiva” y su música cuartetera. Si bien el público parecía ser afecto a otros gustos musicales, el carisma de Cristian Sensén se ganó por completo a los espectadores. La gente aplaudió cada una de sus canciones y terminaron aclamando el clásico “otra” encarecidamente. Banda Expansiva aportó alegría, noche, cuarteto y baile. Una banda que suena muy afilada, reflejo de muchos ensayos y que seguramente crecerá su popularidad si siguen por el camino que insinúan.
Maral fue la fuerza. Una banda con sobrada experiencia arriba del escenario, que explota al máximo la fuerza de las 3 voces que utiliza, sobretodo la de Mariana Dominé y su potencia vocal exquisitamente afinada.
Julia Ferrón subió sola al escenario, pero al finalizar su excelente interpretación de “Someone like you” de Adele parecía estar acompañada por una sinfónica, aunque la sensación era fruto únicamente de sus propias cuerdas vocales. Sin dudas fue el talento más sobresaliente de la noche, una voz increíble que domina tanto los graves como los agudos, y modula de tal forma que pide urgente escenarios nacionales. Julia trajo la magia de su voz, pero también problemas, porque la gente no quería que se baje del escenario y la ovación fue tal que los organizadores la autorizaron especialmente a que agregue canciones a su repertorio. 10 puntos para ella y su música, se retiró aplaudida hasta más no poder.
El cierre estuvo a cargo de Fejumas, con folclore, chacareras, zambas y hasta una demostración de zapateo y baile. Charly Oviedo se compró al público con su querible voz, su humor y sus guitarreadas. La banda que lo acompaña es completa y profesional. Se ganaron a un público que llevaba ya casi 5 horas de música, y así y todo provocaron acompañamiento, palmas, baile y hasta corearon sus canciones.
Un show de primer nivel, reflejo de una ciudad que cuenta con grandes artistas en el sentido musical y grandes personas con un corazón altamente solidario.