Alejandro Guevara y su aventura en el Raid de los Andes
El 13, 14 y 15 de abril, en Salta y Jujuy, el atleta arrecifeño Alejandro Guevara, corrió la carrera de aventuras denominada “Raid de los Andes”, que tiene la particularidad de ser disputada sobre montañas, salinas, puentes y todo tipo de terrenos no convencionales.
A sus 45 años, la destacada actuación que logró en la misma refleja la preparación y el nivel que Alejandro tiene, y de no haber sido por una desafortunada lesión, estaríamos hablando con uno de los ganadores de una competencia de renombre internacional, ya que finalizó 20º entre 600 participantes y 6º en su categoría.
¿Es la carrera más exótica que has corrido?
Sí, junto a la llamada “Cruce de los Andes”, que se hace generalmente en Neuquén y se corre en la cordillera, por arriba del volcán, por las montañas y con nieve. En esa carrera participé junto a Rosana Palavecino, también de Arrecifes, y de los 750 equipos que participaron nosotros llegamos 50º en la general y 10º en la categoría. Es un evento de los más importantes del mundo, participaron 24 países, hubo prensa internacional, 5 helicópteros, es realmente una carrera de primer nivel, sólo que no tiene mucha difusión.
El Raid de los Andes se corre por etapas
Son 3 etapas, la primera fue de Estación Chorrillos a Campo Quijano, es todo el recorrido del Tren a las Nubes, incluso por las vías. Es algo increíble, imposible de describir, te puedo contar que corríamos a oscuras totalmente, tanteando las paredes para guiarnos. La primera etapa tiene 26 kilómetros, pasando por puentes, túneles, ríos, siempre en forma descendente, desde 2500 metros de altura fuimos bajando. Nosotros estamos acostumbrados a correr en el llano o ascender, pero no tanto a descender, por eso en esta etapa te trabajan muchísimo los cuádriceps superiores. La organización en la finalización de cada etapa te espera con un campamento armado, y cada corredor identifica la suya por un número. En esta carrera había aproximadamente 600 atletas.
Recuerdo que en cada pueblo la gente nos esperaba con una amabilidad increíble, la gente del norte es sencilla, nos brindaban todo, lo que queríamos nos daban.
¿Cuánto tiempo se descansa entre cada etapa?
A las 22 hs comienza lo que se llama Silencio de Campamento, y es hasta las 05:00 hs que tenemos que levantarnos. Pero a las 22 hs no te podés acostar, porque son 600 personas para ir al baño, para comer, para acomodar sus cosas del campamento, o sea que hasta las 24 hs no dormís. Y al otro día tenes que dejar tus cosas preparadas y la organización te las lleva hasta la siguiente etapa.
El segundo tramo supongo que varía el paisaje y las dificultades
Sí, trepamos más de 1 km, subiendo a 2.820 metros de altura. Se corrieron 22 Km partiendo desde Tumballa hasta Purmamarca, trepamos por el Cierro 7 colores, pasando por ríos de hielo y llevando el físico a lugares que uno desconoce. Cada uno va a su ritmo, podes parar si lo necesitas, pero yo fui a competir. Recuerdo que al llegar a Tumballa la gente del pueblo nos recibió con música originaria, con instrumentos autóctonos, su amabilidad característica y la humildad de esa gente. Es una carrera muy linda tanto para el físico como para el alma. En esta etapa tenes que estar muy preparado tanto físico como mentalmente.
No se te ocurre pensar “qué estoy haciendo acá”
Eso me ha pasado en muchas carreras, más de una vez. Pero en esta carrera no me pasó, porque me preparé con un entrenamiento específico de 5 meses, con gimnasio, corriendo mucho a fondo y hasta 100 Km semanales, además del entrenamiento que uno lleva desde hace años. Yo fui muy preparado y nunca se me pasó “por qué no estoy en mi casa”.
Y llegaste a la 3º etapa
Esa fue la frutillita del postre, se corre en el Salar, en las Salinas Grandes a 3500 metros de altura. Además había llovido los 2 días anteriores, entonces había entre 10 y 15 cm de agua helada. Fueron 14,5 km y la achicaron a 11,5 km porque había lugares intransitables.
Cómo estabas físicamente
Bien, y además te ayuda la adrenalina, porque generas tanta endorfina que seguís. En esta etapa me lesioné, porque el salar cuando está seco es superficie rígida, pero con agua se le hacen cascarones y el agua queda abajo. Yo pisé y se me fue el talón para atrás, en el kilómetro 3, y me esguincé el empeine. Estaba para podio, venía peleando el 3º puesto de mi categoría, se me caían las lágrimas.
Lágrimas más saladas que nunca
Sabes que no, porque ahí te caen lágrimas dulces. Es tan salado el ambiente, que la transpiración y las lágrimas son dulces comparadas con el ambiente, es una sensación rarísima, te cuento porque probé mis propias lágrimas.
Cuánto influye la altura en la carrera
En mi caso poco, porque me adapté muy bien, estaba muy bien de aire. Pasa muchísimo por la cabeza, yo me mentalicé que la altura no me iba a hacer nada, y si bien el cuerpo va a otra velocidad no me afectó tanto. Lo mental es más importante que lo físico, la cabeza debe estar preparada para llegar a los límites, porque el físico te trabaja más que el 100 %, y en el entrenamiento no podés generar esas cosas que se sí generás en la carrera. Para soportar los dolores, para llegar al límite físico tenés que estar preparado psicológicamente, si no bloqueas mentalmente los dolores no llegás, tenés que pensar en el camino, en lo que viene, en que el de atrás no te alcance, es como que cerrás ventanas y te enfocás en otra cosa.
Además es necesario conocer tu cuerpo para saber hasta dónde podés aguantar
Cuando me esguincé el empeine sentí el ruido, un chico que corría a mi lado exclamó ¡uy! Sentí un fuego y paré, pero el agua estaba helada, te hacía doler los pies de frío. Paré, traté de afirmar el pie, después salí despacito hasta que agarré ritmo, que no era mi habitual de carrera, pero mi meta era llegar. Mi lema para todas las carreras es “no siempre ganar es llegar primero”, porque lo importante es la superación de uno mismo.
¿En qué posición terminaste?
El primer día 25º en la general y 8º en la categoría; el segundo día 21º y 5º; y el tercero llegué 29º en la general y 10º en la categoría. En la competencia quedé 20º en la general y 6º en la categoría. La lesión fue un sabor amargo tremendo, porque estaba tan cerquita de algo que ni siquiera fui a buscar, no buscaba ni podio ni posición, pero estuve tan cerquita que me dolió mucho.
Todo aquel que quiera participar en carreras de aventuras, aunque sea en forma no competitiva, puede acercarse al Círculo de Atletas Veteranos de Arrecifes. Entrenan en la pista de atletismo que está frente al Barrio FONAVI, de lunes a viernes de 14 a 16 hs.
Comente esta nota
comentarios