La Defensoría del Pueblo se expidió sobre un problema con los chicos de 6to grado de la Escuela 18
Desde hace un tiempo, los padres de los alumnos de sexto grado de la Escuela 18 vienen reclamando porque sus hijos «siguen sin docente suplente continua y carecen de un proyecto curricular, lo que genera una falta de continuidad pedagógica, arrojando como resultado una mala calidad educativa y un nivel de enseñanza crítico».
En tal sentido, hacen el reclamo a través de una nota que en principio se hizo pública en los medios y luego fue presentada en el Honorable Concejo Deliberante. Asimismo, tomó partido en el tema la Defensoría del Pueblo de la Ciudad de Arrecifes a cargo del Dr. Leandro Bonacifa, que en un oficio fechado hoy 13 de septiembre y dirigido a la Inspectora Jefe Distrital, solicita que «Se arbitre en forma urgente los medios necesarios a fin que los alumnos de sexto grado de la Escuela Nro. 18 de la ciudad y Partido de Arrecifes, comiencen el periodo lectivo de acuerdo a las normas que rigen la materia, teniendo en cuenta el derecho constitucional a la educación de los niños.
La Defensoría basa su petición en el texto de la Ley 26206 de Educación Nacional; en la misma se establece que la educación y el conocimiento son un bien público y un derecho personal y social, garantizados por el Estado; y que la educación es una prioridad nacional y se constituye en política de Estado para construir una sociedad justa, refirmar la soberanía e identidad nacional, profundizar el ejercicio de la ciudadanía democrática, respetar los derechos humanos y libertades fundamentales y fortalecer el desarrollo económico-social de la Nación.
Hace hincapié en el art. 26, que dice que «La educación primaria es obligatoria y constituye una unidad pedagógica y organizativa destinada a la formación de los/las niños/niñas a partir de los seis (6) años de edad».
Luego de transcribir parte de la ley, cierra expresando «Dada la nutrida normativa que regula la materia, solicito que se inicie la actividad escolar en forma urgente, cesando de esta manera el grave perjuicio ocasionado a estos menores y a sus familias».
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