Segundos posteriores a que el árbitro italiano pite el final del encuentro entre Argentina y Bélgica, cientos de arrecifeños llenaron la Avenida Merlassino al grito de Argentina! Argentina!
Hacía 24 años que la Selección no jugaba una semifinal en una Copa del Mundo, y por eso esta vez sí los festejos fueron más que válidos y demuestran el entusiasmo y la ilusión con que todo el país sigue la Copa.
Banderas, gorritos, banderines, camisetas y hasta pelucas celestes y blancas inundaron las calles de la ciudad, a pesar del frío y el viento del que nadie se acordó porque para Argentina salió el sol.
Hoy más que nunca Pablo Zabaleta nos dio otra inmensa alegría, para hinchar el pecho de orgullo y gritar Volveremos volveremooo, volveremos otra vez, volveremos a ser…
¿Por qué no?
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