Comenzaron a trabajar en el renacimiento del Club Social Argentino
Renacer, porque hace mucho que no tiene actvidad el Club Argentino y un día nos encontramos con una página de facebook abierta a nombre de la institución y que pregona bajo una fotografía del frente del club: «Pondremos en valor este histórico edificio, lo integraremos con arquitectura contemporánea. Para que el pasado no sea simplemente historia y se transforme en presente y futuro y podamos disfrutar del patrimonio de la ciudad. #VolvamosAlClub».
El club ha vuelto a designar autoridades y hoy la comisión la preside Francisco Pernicone, con quien habló la producción de «Sin Corbata» para ver qué se está proyectando allí.
«Surgió la propuesta entre un grupo y nos juntamos por noviembre -dijo Francisco- y nos dieron ganas de hacer cosas por el club, que hace mucho no tiene actividad. Muchos de nosotros no conocemos la historia de club pero no la descartamos, incluso cuando decimos que vamos a empezar de cero. Vamos a respetar la historia pero arranca en el 2017. Ha pasado mucha gente por este club, pero quedó olvidado y ahora en marzo arrancamos con las acividades; escuela de circo, yoga, sipalki, tenemos ya cerrado un convenio con una pileta climatizada que hace un tiempo está cerrada… tenemos muchos proyectos que vamos a ir difundiendo de a poco».
Para los arrecifeños, el CSA es un edificio en el que se juega a las cartas, no se conoce mucho más, y esta es una idea que la nueva comisión deberá revertir, como así también comenzar a sumar socios.
«Agarramos un club con cero actividad y cero socios. Queremos recuperar eso, los socios, recuperar la bajada de los egresados en el patio del Club, y estamos ya trabajando con el edificio, estamos cambiando las instalaciones eléctricas que es viejo, aunque el edificio se mantuvo muy bien hasta ahora, tanto el club como la casa que está al lado. Hay que hacerle cosas pero está bien, vamos a pintarlo y controlar todas las medidas de seguridad para quienes ingresen al edificio.
Con respecto a la construcción, tenemos una arquitecta en la comisión y estamos analizando qué hacer, no queremos modificar nada, pero hay idea de darle más versatilidad al patio para que se puedan hacer distintos eventos… Queremos romper con la idea de que el club sólo es un lugar donde se juega a las cartas».
Arrecifes cuenta con muchos clubes con sedes a las que es difícil mantener y que están todas apuntadas a lo deportivo, el CSA tiene sin dudas otros objetivos.
«Queremos ahondar en lo social y lo cultural, en lo deportivo ya hay muchos clubes y si podemos colaborar con ellos lo haremos, pero esto es un club social y queremos trabajar en eso y en lo cultural. Estamos poniéndonos objetivos cortos».
En algún momento se manejó la idea de fusionar varias instituciones, entre ellas el Argentino, el Náutico, el Gutiérrez, el Aeroclub… no llegaron a un acuerdo y hoy cada una sigue por su lado. Pero el Argentino y el Aeroclub tienen historia en común y según nos cuenta Pernicone seguirán así.
«El Aeroclub está inserto en una propiedad del Club Argentino, y nosotros hemos integrado a dos personas en la comisión del CSA para empezar a darle más vida al Aeroclub, tiene costa del rio, tiene pileta, queremos que se hagan festivales aereos… como se hacía antes y a los que acudía un montón de gente. Hay gente que para tirarse en paracaídas tiene que viajar un montón de kilómetros, cuando tenemos un aeroclub en Arrecifes. Vamos a trabajar en conjunto con ellos».
Alguna vez el viejo club, fue un pilar de actividades culturales en su señorial salón de planta alta; recibió al mismo Jorge Luis Borges el día que estuvo en Arrecifes; supo albergar las actividades del Coro Polifónico en los 70 o los remates de obras de arte organizados por la Biblioteca Pública Municipal. Ahora es el turno de aquellos que no lo vieron en todo su esplendor y que tienen la posibilidad de hacerlo brillar nuevamente.