«Que Sea Rock» fue una tarde a pura música.
El sábado por la tarde se llevó a cabo «Que Sea Rock». Un encuentro de bandas cuyos fundadores son un grupo de alumnos de 5to 1ra de la Escuela Técnica con el apoyo de la Dirección de Cultura de Arrecifes.
En principio pensado para ser realizado en la Estación de la Juventud, finalmente La Plaza Malvinas el lugar que albergó a las casi 400 personas que entre las 16:00 y las 20:00 hs circularon por el lugar siendo testigos y cómplices también de una tarde que tuvo momentos fabulosos sobre el escenario.
Lo más sobresaliente, el set (casi) improvisado de Tucho Duzac en guitarra y voz y Sebastián Rochi en bajo. Dos músicos de reconocida trayectoria que se sumaron a último momento para suplir la ausencia de bandas que sobre la hora desistieron de participar. Con gemas como «Little Wing» de Hendrix más clásicos de Norberto Napolitano, que tan naturales suenan en la voz de Duzac, supieron ganarse el respeto y la atención del público que respondió con ovaciones cada vez que Tucho supo hacer magia desde la viola.
No menos impactante fue la oscura y retorcida versión de Pysho Killer de Talking Heads interpretada por Jhon McClain con la que abrieron una lista de canciones alejadas de sus hits de otros años, pero bien propias de la esencia de una banda con un sonido que le es bien propio, y que a modo de obra conceptual cada uno de sus pasos son un capítulo de su historia musical.
«Que Sea Rock» también tuvo el lujo de contar con Rodrigo Zalloco que al igual que Duzac y los suyos respondió a último momento para junto a Testa en bajo, Previgliano en batería y Sinjovich en voz recordaron canciones de Alejandro Sokol, ex cantante de Las Pelotas. Aunque lo mejor sucedió cuando Rolo se hizo cargo de la situación y tocó varias joyas de Pappo cuya figura fue invocada constantemente toda la tarde como una clara muestra de la influencia en los músicos locales.
Antes, y dando el puntapié a la jornada, la actuación de Metegol. Integrada por Gastón Slaiman en voz y guitarra, Diego Muñoz en guitarra, Luciano Muñoz en teclado y coros, Matías Rapachi en batería y Fermín Giraudo en bajo, el debut fue más que promisorio. Entre temas de Turf, Guasones, Estelares y No Te Va Gustar, supieron marcar firme su primer paso.
Un buen marco de público presenció lo que fue una jornada de excelente nivel musical, con una organización prolija apoyada en un buen sonido que permitió que las bandas pudieran mostrar su música.
Sobre el final, «Alguien» le dio a la gente una muy buena razón para que la gente se haya quedado hasta último momento. Con varios clásicos del rock nacional cerró lo que fue una intensa tarde de rock al aire libre, que merece ser repetida sin que el tiempo pase dejando tan atrás este momento que es otro ladrillo más en la pared de los que hace mucho están construyendo un espacio para que las bandas puedan tocar, ni mas ni menos que su razón de ser.